No te separes de nosotros se propone, en principio y a contramano de la tendencia general, como una irreverente ostentación de afinidad entre seis personas que tienen en común antes que nada —o mejor, entre otras cosas— su oficio de artistas visuales. No intentan soslayar esta corriente de simpatía que los reúne sino todo lo contrario; se trata de exponer/exponerse como integrantes de una red de comunicación e intercambio que desde hace algunos años los hace próximos a pesar de, o gracias a, la azarosa deriva de los encuentros y los alejamientos. Al momento de realizar las piezas que conforman esta exposición, Iñaki Imaz (vasco) vivía en San Sebastián/Donostia; Tulio de Sagastizábal (argentino) vivía en Buenos Aires; Iñaki Gracenea (vasco) vivía en Nueva York; y Octavio Blasi (argentino), Juan Pérez Agirregoikoa (vasco) y Gabriela Kraviez (argentina) vivían en París. Los talleres de Arteleku habían propiciado las primeras coincidencias entre ellos, coincidencias físico-espaciales que se mezclaron con conexiones afectivo-profesionales. Han tomado la costumbre de volver a verse, de tanto en tanto. Se escriben por e-mail y se cuentan lo que están haciendo. En la medida de lo posible se acompañan en sus exposiciones individuales. Entre copa y charla, se puede inferir que se observan y se cuestionan. Y, luego, se alimentan la inspiración y hasta se copian. (Eva Grinstein)
