Reflexionar, sobre Vicente Ameztoy, contemplando a la vez gran parte de su obra, es una labor difícil. Dificultad que se deriva de los aromas y sabores —klorofila— que se desprendende su pintura y de las imágenes que componen el conjunto de cajas, objetos, dibujos, etc.. que nos están hablando, todos ellos, de una forma de entender la vida , de estar en el mundo y de ser artista —karne— . No es fácil, tampoco, hacer un recorrido de reconocimiento sobre la vida de Vicente por que casi todo lo que sabemos de él está en su trabajo y en su presencia. Ahora tenemos la oportunidad de disfrutar de la visión de gran parte de la obra de Vicente —casi la totalidad del trabajo realizado a partir de 1976— en la Sala de Exposiciones de Arteleku.